Fernando Salazar Palma,
Presidente Ejecutivo CESCE
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La crisis provocada por la pandemia del coronavirus ha puesto a prueba nuestra capacidad de resistencia a todos los niveles: como individuos, como familias y también como comunidad. Una comunidad que, hasta ahora, creíamos preparada para soportar casi cualquier contratiempo. Esta crisis nos ha mostrado, abrupta y amargamente, lo frágil que era nuestra seguridad.
Las empresas son una parte importante de nuestra comunidad. De nuevo, las circunstancias actuales han puesto en cuestión los planteamientos y previsiones de muchos negocios.
Las empresas son una parte importante de nuestra comunidad. De nuevo, las circunstancias actuales han puesto en cuestión los planteamientos y previsiones de muchos negocios y han demostrado lo imprescindible que es contar con un respaldo adecuado para afrontar situaciones imprevistas. Desde la perspectiva del seguro, hasta ahora, muchas empresas recurrían a la opción del autoseguro para cubrir sus riesgos, entre ellos, el de impago. Esa opción requiere contar con una determinada capacidad de financiación para afrontar esos riesgos. Y era una opción perfectamente válida en condiciones normales. Pero las circunstancias han cambiado abruptamente y la capacidad de financiación se ha visto muy mermada en las circunstancias actuales. El Estado ha puesto en marcha mecanismos para tratar de mitigar esta situación, como la línea de avales para préstamos bancarios encargada al ICO, pero también la línea extraordinaria de cobertura de créditos de circulante con cobertura de CESCE por Cuenta del Estado.
CESCE es la entidad encargada de gestionar esta medida, en su calidad de gestor exclusivo de los seguros de internacionalización empresarial por Cuenta del Estado. Estamos trabajando intensamente para poner a disposición de las empresas esta línea por valor de 2.000 millones de euros, la mayor operación jamás realizada por CESCE por Cuenta del Estado. Esta línea está destinada a facilitar el acceso a la financiación de aquellos negocios que han visto interrumpida su actividad por los efectos de la pandemia. Pueden beneficiarse de la ayuda los exportadores regulares (que hayan exportado ininterrumpidamente durante los últimos 4 años) o aquellas empresas en las que la exportación suponga, al menos, un tercio de su facturación total, sin que la financiación esté ligada a alguna operación concreta de exportación. Las empresas beneficiarias deberán ser Pymes o empresas no cotizadas y no pueden estar inmersas en situación concursal, pre-concursal o en impagos con las Administraciones públicas.
Hay algunas herramientas adicionales que pueden ayudar a amortiguar las consecuencias del parón económico actual y de la incertidumbre que se va a generar en un futuro cercano acerca de la verdadera situación financiera de muchas empresas. Por ejemplo, recurrir a una póliza de seguro de crédito. Las empresas que recurren a este seguro tienen algunas ventajas importantes: aseguran sus ventas, transfiriendo una parte de sus riesgos a un tercero para que, en caso de impagos o cierre de su empresa cliente, la aseguradora se encargue de cubrir esos riesgos. CESCE se encuentra entre las empresas que ofrecen este tipo de seguros en el mercado español. Disponemos de un amplio abanico de soluciones y es particularmente adecuada a la situación actual nuestra póliza CESCE Fácil, cuya contratación es muy sencilla e íntegramente electrónica, sin necesidad de desplazamiento alguno.
Como aseguradora por Cuenta Propia, CESCE ha activado, además, un paquete especial de ayudas para sus asegurados. Por ejemplo, hemos ampliado los plazos contractuales y los plazos para notificar ventas y documentar impagos. También hemos aplazado el pago de las primas, entre otras medidas excepcionales de flexibilidad. Y estamos estudiando medidas adicionales, si la situación lo requiere.
Las soluciones de CESCE están destinadas a todo tipo de empresas, en particular a las Pymes, que constituyen el 99% de nuestro tejido empresarial. Más de 2,8 millones de pymes necesitan respaldo en España en estos momentos y estas medidas pueden ayudarles a paliar los efectos de la pandemia, que ha congelado de golpe las economías de todo el mundo.
El escenario de emergencia está generando, además, nuevas necesidades porque muchas empresas e industrias se han tenido que reconvertir para adaptarse a la situación. Desde el sector asegurador debemos estar atentos a ese factor y debemos prepararnos para ofrecer soluciones que se ajusten a esa nueva realidad.
El escenario de emergencia está generando, además, nuevas necesidades porque muchas empresas e industrias se han tenido que reconvertir para adaptarse a la situación. Desde el sector asegurador debemos estar atentos a ese factor y debemos prepararnos para ofrecer soluciones que se ajusten a esa nueva realidad. Porque nuestro futuro a medio y largo plazo va a depender de nuestra respuesta ante esta crisis y de cómo nos blindemos a partir de ahora.
Acabo deseándoles mucho ánimo en estos tiempos tan difíciles que nos ha tocado vivir, y que sin duda superaremos, y rogándoles que cuenten con nosotros para todo aquello en lo que podamos ayudarles.
