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El CFO, la figura clave en la transformación digital de una empresa

Embat

  • Según el reciente Libro Blanco que ha lanzado Embat, la fintech española especializada en la gestión de tesorería en tiempo real en la nube, el CFO es la figura clave para liderar la transformación digital de una empresa gracias a su conocimiento de las variables críticas del negocio.
  • Inteligencia artificial, blockchain, automatización robótica de procesos (RPA) y machine learning, son algunas de las nuevas tecnologías que formarán parte de las funciones diarias del CFO en el futuro.
  • Es imprescindible que el CFO trabaje sus soft skills y tenga inteligencia emocional para empatizar con el equipo y cada vez es más común que el CFO sea considerado como el “número 2” del CEO y que acabe por convertirse en el sucesor natural interno de este.

 

Estos últimos años hemos presenciado cambios significativos en el mundo empresarial, sobre todo en los equipos financieros, debido a la digitalización y automatización de las tareas laborales manuales. La tecnología optimiza procesos, liberando tiempo para tareas de mayor valor e impacto en el negocio. Este cambio de paradigma se traduce en una transformación de las figuras empresariales que hasta ahora se habían mantenido firmes en su posición de realizar sus labores de la manera más “tradicional” y, entre ellas, destaca la figura del CFO (Chief Financial Officer).

El CFO o Director Financiero de una compañía es el responsable de la planificación económica y financiera de esta, y es quien debe asegurarse del correcto funcionamiento de su inversión y financiación. Según Embat, la empresa fintech española especializada en la gestión de tesorería en tiempo real en la nube, es el CFO quien tiene la obligación de liderar esta inevitable transformación digital dentro de la organización, pues es él quien posee una visión 360º sobre la empresa. Justo esta es la ventaja competitiva de la que dispone para asumir el liderazgo: el conocimiento que posee sobre las variables críticas del negocio. Así pues, el Director Financiero (CFO) debe resignarse en sus acciones tradicionales y, a su vez, desarrollar nuevos roles que le permitan adquirir un papel más transversal.

Entre sus nuevas responsabilidades a asumir se encuentra, en el número uno, experimentar con el uso de nuevas tecnologías y herramientas. Esto es, manejar y conocer a fondo las nuevas funcionalidades en el área financiera, para posteriormente, extrapolar su experiencia al resto de la organización y departamentos de la compañía. El CFO debe poder “romper” con la percepción de que su trabajo se limita casi de forma exclusiva al reporting financiero. Inteligencia artificial, blockchain, automatización robótica de procesos (RPA) y machine learning, son algunas de las nuevas tecnologías que formarán parte de las funciones diarias del CFO en el futuro. Se trata de utilizar estos avances tecnológicos para diseñar nuevos métodos de trabajo que sean más ágiles y sencillos y, en definitiva, más automatizados.

Según Pablo Escobar, director financiero con más de 20 años de experiencia: “El CFO debe orientar su gestión, no solo desde la prudencia financiera que ya forma parte de nuestro ADN, sino que también debe enfocarse en el crecimiento propio del negocio y de las personas de la organización. Se trata de adoptar una nueva mentalidad en la que las finanzas serán una parte importante en sus funciones, pero no excluyente”.

Otro aspecto clave en la futura figura del CFO es la inteligencia emocional, una asignatura que suele estar pendiente de mejorar en lo que se refiere a la imagen del Director Financiero. Debe poder gestionar con éxito lo que se denominan como las “soft skills”, o habilidades blandas, y desarrollar así su comunicación empática. Para conducir al resto de departamentos de la compañía, no solo es necesario gestionar las necesidades materiales de estos, si no que también lo es la gestión de las emociones de sus integrantes y poder ser capaz de dar solución a la resistencia natural al cambio que tenemos todas las personas. De esta manera, el CFO podrá guiar a la organización de una manera mucho más efectiva hacia el cambio tecnológico.

Tal y como señala Antonio Berga, cofundador de Embat: “A medida que la figura del CFO evoluciona hacia un rol cada vez más estratégico, sus nuevas funciones se complementan aún más con las del CEO y se va estrechando su relación con él, por lo que pasa a ser el candidato favorito para convertirse en el sucesor natural interno. Pero esto no significa que el camino a recorrer para asumir la figura de Director General en el futuro sea un paseo en línea recta, al contrario.” A lo que añade: “El CFO tiene que asumir ciertos retos ligados a la gestión de lo emocional y a los aspectos no verbales de la comunicación, algo que puede suponer un gran desafío en muchas ocasiones, dado que antes la parte de hard skills predominaba sobre los soft skills ”.

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