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En un entorno empresarial donde cada euro cuenta, conocer el coste real de cada empleado es fundamental para la rentabilidad. Más allá del salario bruto, hay una serie de factores invisibles que impactan en la estructura de costes de una empresa. ¿Cuánto cuesta realmente un empleado y cómo pueden los financieros optimizar este gasto sin comprometer el talento?
Cuando pensamos en los costes laborales, el salario es solo la punta del iceberg. Según un estudio de Randstad, los costes laborales en España han aumentado un 4,5 % en el último año, impulsados por cotizaciones a la Seguridad Social, beneficios adicionales y la inflación.
Teniendo en cuenta estos factores, una empresa puede estar pagando hasta un 26.5% más del salario neto de un empleado en costes ocultos.
Pequeño: Fuente: Instituto Nacional de Estadística (INE)
Como se observa en el gráfico, el salario bruto representa el 73.5% del coste total, mientras que el resto se distribuye en cotizaciones, formación, gastos administrativos y otros conceptos que muchas empresas subestiman.
Para muchas empresas, reducir costes significa recortar personal o beneficios. Sin embargo, hay formas más inteligentes de optimizar los gastos sin comprometer la experiencia del talento:
Las tareas manuales en gestión de nóminas, firmas de contratos o control de gastos generan costes ocultos en horas de trabajo y posibles errores. Digitalizar estos procesos con herramientas como Factorial permite reducir tiempos y optimizar recursos.
Según datos de la consultora Deloitte, el 45% de los gastos de empresa no están bien categorizados ni controlados, lo que dificulta la optimización financiera. Automatizar la gestión de gastos con tarjetas corporativas digitales permite a las empresas un control en tiempo real y evita fraudes internos.
El coste de reemplazo de un empleado puede llegar al 50%-60% de su salario anual, según un informe de Gallup. Implementar estrategias de fidelización y desarrollo profesional ayuda a minimizar la rotación y, por tanto, los costes de contratación y formación.
Conocer en detalle los costes laborales es clave para tomar decisiones estratégicas. Las empresas que utilizan herramientas de cálculo y análisis financiero pueden optimizar su presupuesto hasta en un 30%, según McKinsey.
Moran Laufer, CFO de Factorial, explica:
"En muchas empresas, los costes laborales son el mayor gasto, pero pocas veces se analizan en profundidad. La digitalización permite visualizar en tiempo real estos costes y optimizarlos sin afectar la calidad del equipo. Tener herramientas que te ayuden a entender realmente cuánto cuesta cada empleado es clave para una planificación financiera eficiente."
Si quieres descubrir cuánto está invirtiendo tu empresa en talento y cómo optimizarlo, descarga nuestra Calculadora de Coste de Empleado. Con esta herramienta gratuita, obtendrás un desglose detallado de los gastos laborales y podrás tomar decisiones estratégicas basadas en datos.
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El coste oculto de los empleados es un reto para cualquier departamento financiero. Sin embargo, con las herramientas y estrategias adecuadas, las empresas pueden optimizar sus costes sin comprometer la motivación y productividad de su equipo. La clave está en tener visibilidad, digitalizar procesos y tomar decisiones basadas en datos.