Carlos Sánchez,
Colaborador de Asesores de Pymes externo a Cesce
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Los CFO disponen de los conocimientos, experiencia y facultades para lidiar con las diferentes incidencias que pueden sacudir súbitamente la realidad de cualquier compañía. Por ello, deben contar con el apoyo permanente de la dirección general y con la capacidad para interactuar de manera libre con los diferentes responsables de los departamentos de una organización.
En un contexto de permanente incertidumbre global, los CFO están cada vez más llamados a liderar no sólo la gestión contable de las empresas en las que trabajan sino la identificación de oportunidades de negocio así como la implementación de medidas para mejorar la eficiencia y competitividad de las organizaciones.
Promotores de la disrupción
Conflictos bélicos que afectan a las cadenas de suministros, regulación creciente que impacta negativamente en el negocio, falta de liquidez y dificultad en el acceso al crédito,... La realidad en la que conviven las compañías está llena de incertidumbres y de cisnes negros que no se pueden prever y mucho menos controlar. En este sendero lleno de obstáculos, con frecuencia la diferencia entre el éxito y el fracaso viene marcada por la gestión activa del liderazgo.
A nivel operativo, los CEO y los diferentes responsables de los departamentos están llamados a gestionar las distintas vicisitudes con creatividad, agilidad y disciplina. Sin embargo, a nivel más global, quienes tienen mucho que decir son los CFO gracias a que su desempeño contable les otorga una visión holística de la realidad de la empresa a todos los niveles.
De hecho, su labor en la coyuntura actual puede abarcar diferentes disciplinas y quehaceres desde una amplia gama de puntos de vista, como pueden ser:
- Embajadores de la disrupción. El pensamiento fuera de la caja no es ya sólo algo propio de los directores generales o de los creativos sino que que los responsables financieros son capaces de leer entre la inmensa cantidad de datos que gestionan para identificar oportunidades y promover proyectos disruptivos que puedan suponer un cambio de rumbo de sus compañías respectivas hacia el éxito.
- Solucionadores de conflictos. Precisamente, de ese análisis permanente de la información de la que disponen, los CFO pueden intervenir como mediadores entre los responsables de departamentos no sólo para solucionar posibles incidencias sino para proponer medidas que favorezcan un mejor desempeño común. En este sentido, desde la dirección general se debe estimular ese rol de liderazgo organizacional para los responsables financieros.
- Agentes de la digitalización. El apoyo en su trabajo de apps y otras herramientas digitales para mejorar el número de incidencias contables, debe servir también para mejorar la introducción de las novedades telemáticas que pueden tener un impacto positivo en la productividad de cada compañía. Por ejemplo, los CFO pueden educar acerca de la importancia de apostar por las videoconferencias o estimular la solución de incidencias contables a través de software que permita la interacción no sólo entre el capital humano de la empresa sino con el resto de stakeholders, como clientes y proveedores.
- Apuesta permanente por la creatividad. Los CFO están acostumbrados a lidiar con problemas financieros a corto plazo, como la mejora de la gestión de la tesorería o la reducción de los niveles de morosidad. Por ello, disponen de la experiencia suficiente con la que lidiar con los problemas urgentes e inesperados que, repentinamente, sacuden la realidad de una entidad. En este sentido, deben ser tenidos en cuenta de manera periódica para conformar equipos de gestión de crisis cuando sean necesarios, habida cuenta del conocimiento y know how que, sin duda, pueden aportar.
- Emprendedores y visionarios. Al analizar no sólo la realidad contable de la organización sino, también, evaluar la situación financiera de los competidores, los CFO disponen de una posición envidiable para captar posibles nichos de crecimiento y aportar ideas sobre cómo introducirse en nuevos negocios y mercados. Para lograr una máxima eficiencia en este sentido, los CFO deben contar con un mandato expreso por parte de la dirección general para tener la cabeza puesta en la captación de estos posibles proyectos de emprendimiento pudiendo, si así lo estiman, consultar o apoyarse en otros líderes de la compañía.
- Los mejores expertos. Una de las realidades cotidianas con las que ha de lidiar la mayoría de las empresas en la actualidad es que resulta muy complicado establecer planes a varios meses vista. Sin embargo, si alguien puede ocuparse de esta planificación con un elevado porcentaje de éxito ese es el CFO gracias a que tiene la capacidad de analizar el mercado y la realidad de la empresa en su conjunto. Gracias a ellos, la entidad podrá lograr una posición competitiva gracias a que podrá sintonizar sus objetivos de largo plazo con la realidad cotidiana, sin tener que estar continuamente apoyándose en la gestión de crisis para conseguirlo.